Antes que nada, hay que dar crédito en este artículo a uno de los blogs más leídos, de habla hispana, el de la agencia española Territorio Creativo (etc.territoriocreativo.es), de dónde nos desayunamos muchas noticias aquí en Directa.
Cuando se es niño es mucho más fácil imaginar el futuro, no hay regla que contrarie el deseo de ser bombero, piloto, enfermera, jugador de fútbol, caballero medieval o agente secreto.
Poco antes de llamarnos adultos nos dejamos seducir por alguna tontería para iniciar nuestros estudios; no por nada la mezcla de CSI: Las Vegas y el nuevo sistema acusatorio dieron como resultado ordas de institutillos de criminalística, esparcidos por todo el país. Más tarde, al llamarnos "empresa", se suma a nuestra adultez paradigmática la de los demás, sus mañas, sus vicios, sus taras y el lastre de TODO LO QUE DEBE Y NO HACERSE según reza, como si fuera mandamiento enmarcado en el lobby, la misión y visión corporativa (cabe anotar que no incluimos los caprichos del "dueño del letrero").
Todo lo contrario se demuestra en este spot (que no señores, no sale en televisión), es de una agencia ubicada en el glamouroso Broadway llamada Connected Ventures, se muestra infante, dinámica y "en pelota"; —que buena vaina.
Que el trabajo sea grande, pero la gente se mantenga "pequeña", no, no, mejor... queremos ser así cuando seamos grandes... no, tampoco... mejor: el que se acuesta con niños... a buen palo se arrim... no; bueno, esa es la idea.
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